Si eres de los que cuida mucho sus zapatos cepillándolos y lustrándolos con regularidad, no bajes la guardia cuando no los estés usando tirando tus zapatos al armario.

Hay un enfoque de tres pasos para guardar los zapatos correctamente. Vamos a repasar los tres aquí.

1. Pon hormas en cada zapato

Una horma, que ahora está disponible a través de Red Moose, es una de las mejores maneras de añadir longevidad a la vida de sus zapatos. No solo permiten que el zapato conserve su forma, sino que los materiales con los que están hechos permiten que la humedad que el zapato absorbe del pie se transfiera a la horma. Esto evita que la piel de los zapatos se arrugue y se agriete con el tiempo.

2. Empaca el zapato

Una bolsa de franela es lo mejor para tu zapato después de haber colocado la horma adentro. Estos brindan protección contra otros zapatos para que no se golpeen, rayen o raspen entre sí. También querrás usarlos mientras viajas para proteger el resto de tu ropa en tu maleta.

3. Colócalos en la Caja

No se deshaga de esa caja de zapatos, ¡guárdela para guardarla! Esta es la mejor manera de guardar un zapato, pero si tiene poco espacio, siempre puede optar por un zapatero para colocar sobre la puerta o comprar o hacer bastidores para colocar a lo largo de la pared. Si hace esto, asegúrese de seguir los primeros dos pasos aquí para que los zapatos no sean susceptibles a daños.

¡Antes de guardar sus zapatos, asegúrese de comprar la línea completa de abrillantadores, ceras, cepillos, acondicionadores, calzadores y más de Red Moose !